El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, dijo el miércoles que responsabiliza a los militares birmanos por una brutal campaña de limpieza étnica en contra de las minorías rohinyá, que ha matado a miles de rohinyás y forzado a medio millón a huir al vecino Bangladesh.
Rex Tillerson declaró: “Bueno, estamos extraordinariamente preocupados por lo que está sucediendo con los rohinyás en Birmania. Estuve en contacto con Aung San Suu Kyi, la líder del sector civil del gobierno. Como saben, el tipo de gobierno que ha surgido en Birmania es un gobierno donde el poder está compartido. Realmente responsabilizamos a los líderes militares por lo que está sucediendo con el área rohinyá”.
La organización Human Rights Watch y otros grupos han solicitado al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas que imponga un embargo de armas contra Birmania por la violencia en curso. Israel sigue siendo uno de los principales proveedores de armas del Ejército birmano.