En España, el presidente Mariano Rajoy afirmó el sábado que ejercería dominio directo sobre Cataluña luego de que los líderes de la región nororiental realizaran un referendo por la independencia el 1° de octubre y tomaran medidas para independizarse de España. La orden de Rajoy, que necesita de la aprobación del Senado español, impondría la destitución de las autoridades catalanas y la realización de nuevas elecciones dentro de los próximos seis meses. El anuncio suscitó indignación en la capital de Cataluña, Barcelona, donde casi medio millón de personas inundó las calles como señal de protesta. La presidenta del parlamento catalán se refirió a la orden de Rajoy como un golpe de Estado.
Carme Forcadell afirmó: “El día de hoy, el presidente Rajoy, en un gran acto de irresponsabilidad política, cruzó todos los límites. Anunció la aplicación de un golpe de Estado de hecho a través del cual pretende intervenir y tomar el control de las instituciones catalanas, un ataque contra la democracia y contra la Europa del siglo XX, con el objetivo de poner fin a un gobierno electo de forma democrática”.
El presidente de la región de Cataluña, Carles Puigdemont, se refirió a la decisión de Rajoy como el peor ataque contra las instituciones catalanas desde la dictadura del general Francisco Franco. Puigdemont sostuvo que el parlamento de Cataluña se reunirá en los próximos días para analizar sus próximos pasos, entre los cuales se especula que podría declarar la independencia catalana de forma unilateral. Visite www.democracynow.org/es para ver más información sobre la crisis en Cataluña.
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