El martes, en Estados Unidos, los demócratas lograron grandes victorias en las elecciones; los votantes se volvieron contra el Partido Republicano un año después de que Donald Trump fuera electo presidente. En Nueva Jersey, el demócrata Phil Murphy derrotó a Kim Guadagno, reemplazando al para nada popular gobernador republicano Chris Christie.
En Virginia, el demócrata Ralph Northam derrotó al republicano Ed Gillespie en una contienda para gobernador que fue considerada ampliamente una especie de referéndum sobre las políticas del presidente Trump. En respuesta, Trump tuiteó: “Ed Gillespie trabajó duro pero no me representaba a mí ni a mis valores”. El discurso de aceptación de Northam fue brevemente interrumpido por activistas defensores de los derechos de los inmigrantes, que protestaron por su promesa de aprobar una prohibición de las “ciudades refugio” cuando fuera gobernador. La protesta condujo a un oficial de seguridad a retirar rápidamente a Northam del escenario.
En Maine, los votantes aprobaron extender Medicaid a los adultos de bajos ingresos, en lo que constituye al mismo tiempo un desafío al gobernador republicano Paul LePage y una muestra de apoyo a la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio.
En Ohio, los votantes rechazaron una medida que hubiera obligado a las compañías farmacéuticas a reducir el precio de los medicamentos recetados, luego de que las grandes compañías farmacéuticas gastaran tres veces más dinero que su oponentes en la campaña. En el estado de Washington, los demócratas le arrebataron la mayoría en el Senado estatal a los republicanos y tomarán el control de todo el gobierno del estado.
En Nueva York, los votantes rechazaron una convención para reescribir la constitución del estado, mientras que en la ciudad de Nueva York, el alcalde Bill de Blasio fue reelecto para un segundo mandato por abrumadora mayoría.
En Filadelfia, Pensilvania, el abogado especialista en derechos civiles Larry Krasner fue electo fiscal de distrito. Krasner se opone desde hace mucho tiempo a la pena de muerte y al procedimiento policial de detener y cachear. También ha representado a manifestantes de las organizaciones Black Lives Matter, ACT UP y Occupy Philadelphia, entre otros grupos progresistas.
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