En Francia, manifestantes pertenecientes al movimiento conocido como “chalecos amarillos” tomaron las calles nuevamente durante el fin de semana. El sábado, en París, un grupo de manifestantes embistió un montacargas contra el edificio de un ministerio del Gobierno, al tiempo que violentos enfrentamientos entre algunos manifestantes y la policía tuvieron lugar en la capital. Según reportes, cerca de 50.000 personas salieron a las calles a lo largo del país, mientras la movilización entra en su segundo mes de protestas. El domingo, cientos de mujeres organizaron sus propias manifestaciones de “chalecos amarillos” en un intento de contrarrestar la reciente violencia y resaltar los problemas económicos que enfrentan las mujeres trabajadoras. Estas son palabras de la manifestante Sophie Tissier.
Sophie Tissier expresó: “Hay vándalos, principalmente hombres, que se meten en las protestas. Y les decimos: ‘Nosotras, las mujeres con chalecos amarillos, queremos hacer algo pacíficamente, tranquilamente. Estamos haciendo un llamamiento por los derechos de nuestras mujeres a protestar y participar en la lucha’. […] La situación es muy, muy difícil para las mujeres en esta sociedad. Somos principalmente nosotras quienes cuidamos a los niños. Tenemos salarios más bajos que los hombres. Muchas estamos empleadas en trabajos inestables, es mucho más difícil para las mujeres en la sociedad actual, es mucho más difícil”.