El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, ordenó al Departamento de Justicia que reanude el uso de la pena de muerte y le pidió a la Oficina Federal de Prisiones que programara ejecuciones para cinco presos condenados a muerte. El Gobierno federal no ha ejecutado a ningún recluso desde 2003. Los cinco presos condenados a muerte fueron condenados por matar niños. Robert Dunham, director del Centro de Información sobre la Pena de Muerte, dice que parece que fueron seleccionados cuidadosamente para reprimir la oposición pública a la reanudación de las ejecuciones federales.
Robert Dunham declaró: “Creo que el hecho de que los cinco casos fueran seleccionados debido a factores que son irrelevantes para la jurisdicción federal subraya que estos casos no fueron seleccionados porque justifican la pena de muerte federal. Fueron elegidos porque estaban destinados a enardecer al público”.
Según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte, más de 160 personas en Estados Unidos que fueron condenadas erróneamente y condenadas a muerte han sido exoneradas desde 1973. Visite democracynow.org/es para obtener más información sobre la decisión del gobierno de Trump de restablecer las ejecuciones federales.