El miércoles, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se refirió a sí mismo como “el elegido” mientras discutía las negociaciones en curso para lograr un acuerdo comercial con China. Esto ocurrió después de que retuiteó a un conspiracionista que comparó a Trump con el rey de Israel y dijo que los judíos “lo aman como a la segunda venida de Dios”. Mientras tanto, Trump redobló su afirmación de que los judíos estadounidenses que votan por el Partido Demócrata son ignorantes o desleales. Los comentarios iniciales fueron pronunciados por Trump un día antes, cuando atacó a las congresistas Rashida Tlaib e Ilhan Omar, a quienes recientemente se les prohibió ingresar a Israel y Palestina a instancias de Trump. Estas son las palabras pronunciadas el miércoles por Trump ante la prensa en las afueras de la Casa Blanca.
El presidente Donald Trump afirmó: “En mi opinión: si usted vota por un demócrata, está siendo muy desleal con el pueblo judío y está siendo muy desleal con Israel. Y solo una persona débil diría algo diferente”.
Los comentarios hechos por Trump provocaron la condena de los demócratas y de muchas organizaciones judías. En un comunicado, la rabina Alissa Wise, de la organización Voces Judías por la Paz, afirmó que Trump había repetido un tropo antisemita sobre la “doble lealtad” de los judíos, y agregó: “Su falsa preocupación por los judíos no nos engaña, ya que sus acciones han demostrado que no le preocupa la seguridad de los judíos, sino usar a los judíos para ganar puntos políticos con su base nacionalista blanca. De hecho, por su continuo aliento a la supremacía blanca y sus ataques racistas diarios contra inmigrantes y personas de color, Trump está haciendo que la comunidad judía estadounidense esté menos segura cada día”.
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