Escocia se ha convertido en el primer país del mundo en ofrecer productos menstruales gratuitos y de fácil acceso. Los legisladores aprobaron el martes el histórico proyecto de ley, que tiene como objetivo terminar con la llamada “pobreza menstrual” que impide que miles de mujeres y niñas puedan acceder a productos para la menstruación. La nueva ley también garantiza que las escuelas y otras instalaciones públicas tengan tampones y toallas sanitarias disponibles sin costo. Estas fueron las palabras expresadas por Mónica Lennon, la legisladora que presentó el proyecto de ley, en un discurso pronunciado antes de la votación.
Mónica Lennon: “La idea de que alguien tenga que ir a un banco de alimentos para conseguir comestibles, artículos de aseo personal y productos esenciales para la menstruación sigue siendo inaceptable, y tenemos mucho trabajo por delante para abordar la desigualdad de la riqueza en nuestra sociedad. (…) El impacto de la pandemia de COVID-19 en la salud pública y en los ingresos solo fortalece los argumentos a favor de este proyecto de ley. La menstruación no se detiene durante la pandemia”.