En la ciudad de Alvarado, en el estado de Texas, 11 inmigrantes recluidos en el Centro de Detención de Prairieland entablaron una demanda judicial colectiva contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en la que solicitan su liberación, luego de que en esa cárcel privada 45 personas dieran positivo en pruebas de diagnóstico de coronavirus. Los reclusos afirman que el Servicio de Inmigración continúa transfiriendo inmigrantes a otras instalaciones de todo el país, lo que genera el riesgo de que la COVID-19 se propague de una cárcel de migrantes a otra.
En el estado de Arizona, 14 inmigrantes detenidos en el Centro de Detención de Florence, cerca de la ciudad de Phoenix, comenzaron una huelga de hambre en protesta por las pésimas condiciones dentro de las instalaciones. Las siguientes son palabras de uno de los inmigrantes de Florence en huelga de hambre.
Un huelguista expresó: “Hay 14 infectados aquí y los han mandado al hoyo. A los que están enfermos los mandan al hoyo. Entramos en huelga de hambre desde hoy. Y nos detendremos cuando nos saquen en cajones. Tendrán que sacarnos en cajones, porque ya no creemos en ellos”.