En Estados Unidos, autoridades de la ciudad de Louisville, en el estado de Kentucky, anunciaron el martes que pagarán 12 millones de dólares a la familia de Breonna Taylor y establecerán una serie de reformas en el Departamento de Policía responsable de su muerte, más de seis meses después de que la policía disparara fatalmente en su propio apartamento a la afroestadounidense de 26 años de edad, que se desempeñaba como técnica de urgencias médicas. El alcalde de Louisville, Greg Fischer, anunció el histórico acuerdo en una conferencia de prensa con la familia de Taylor. El abogado Benjamin Crump valoró positivamente el acuerdo, pero reclamó el procesamiento penal de los policías que mataron a Taylor tras ingresar a su apartamento con una orden de allanamiento que les permitió entrar en la propiedad sin llamar a la puerta el 13 de marzo.
Benjamin Crump sostuvo: “Seguimos exigiendo que el fiscal general de Kentucky, Daniel Cameron, presente cargos inmediatamente contra los agentes de policía que asesinaron a Breonna Taylor. Inmediatamente. Esta semana. La justicia demorada es justicia denegada”.
Como parte del acuerdo, se hizo mención a una docena de cambios en el funcionamiento operativo del Departamento de Policía de Louisville, que incluye mayor supervisión por parte de los altos mandos y un sistema de alerta temprana para identificar a agentes de policía acusados de uso de fuerza excesiva. Visite democracynow.org/es para ver más información sobre la muerte de Breonna Taylor a manos de la policía.
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