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El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, pronto podría enfrentar cargos en Estados Unidos, luego que el 10 de diciembre un tribunal del Reino Unido hiciera lugar a un recurso de apelación presentado por el Gobierno estadounidense para extraditarlo. El juez británico Timothy Holroyde dijo que estaba satisfecho con el compromiso expresado por Estados Unidos de no enviar a Assange a la llamada cárcel de máxima seguridad ADX ubicada en el estado de Colorado. En enero, un tribunal de distrito del Reino Unido había fallado que Assange no debía ser extraditado porque, en el marco de su actual estado de salud mental, dicha experiencia sería “opresiva” y Assange podría suicidarse en una cárcel de Estados Unidos. “No pueden garantizar su seguridad en el sistema penitenciario de Estados Unidos. Es probable que aquí muera, si no es que muere antes”, dice Gabriel Shipton, cineasta y hermano de Julian Assange. “Pensemos lo que significará este precedente en todo el mundo si cualquier régimen ahora puede señalarnos y decir: 'Queremos extraditar a estos periodistas'”, agrega Ben Wizner, director del Proyecto de Discurso, Privacidad y Tecnología de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Ben Wizner y Gabriel Shipton.
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