En la región del Sahara Occidental ocupada por Marruecos, decenas de agentes marroquíes enmascarados irrumpieron en el domicilio de Sultana Khaya, una reconocida activista saharaui por los derechos humanos que ha estado bajo arresto domiciliario durante los últimos seis meses, y agredieron sexualmente a ella y a su hermana Ouarra. Las hermanas afirman que los agentes marroquíes irrumpieron en su domicilio a la madrugada mientras la familia dormía, agredieron a su hermano, rociaron la casa con un líquido de olor fétido y los ataron.
Ouarra Khaya: “Insertaron palos dentro de nuestras nalgas. Exactamente en nuestras nalgas. Fue una violación”.
Sultana Khaya: “Lo que nos ha pasado es increíble. Mire, tengo el ojo lastimado. Recibí varios golpes. Sentí que me asfixiaba. Me duele el hombro. Me han hecho de todo. […] Como les decía a los ocupantes marroquíes, seguiré luchando, no me rendiré. No importa si derriban la casa y la convierten en barro, no importa. Seguiré luchando”.
Amnistía Internacional ha instado a Marruecos a que “finalice el arbitrario arresto domiciliario” contra Sultana Khaya y su familia. El Sáhara Occidental ha estado bajo ocupación militar marroquí desde que España, la anterior potencia colonial, se retirara en 1975. En noviembre pasado, Marruecos violó el alto el fuego de 29 años con el Frente Polisario y la guerra regresó a la región, seguida de una represión marroquí contra la población indígena saharaui.
Vea aquí nuestro reportaje titulado “Cuatro días en el Sahara Occidental ocupado. Una mirada exclusiva desde la última colonia en África”.