Grupos de ayuda humanitaria internacional advierten que más de doce millones de personas en Irak y Siria no están teniendo acceso a alimentos, agua y electricidad debido a la crisis del cambio climático, y que se necesita tomar medidas urgentes para combatir la grave sequía que afecta a esos países. Estas fueron las palabras expresadas por un granjero iraquí.
Haji Hassa: “Mi familia y yo trabajamos en esta granja. Es mi fuente de ingresos y nuestro sustento depende de ella. Debido a la sequía, no pudimos cosechar nada este año y no puedo hacer nada al respecto”.
Mientras tanto, Unicef advierte que, si no se toman medidas inmediatas, más de cuatro millones de personas en el Líbano, en su mayoría familias y menores en situación vulnerable, podrían enfrentar pronto una grave escasez de agua.