En la República Democrática del Congo, los combates entre el ejército y los rebeldes del grupo M23 se han acercado a la ciudad oriental de Goma. La situación de violencia es una de las peores que se ha experimentado en la provincia congoleña de Kivu del Norte desde que las fuerzas armadas gubernamentales persiguieron en 2013 a los rebeldes, que tuvieron que huir al país vecino de Ruanda. Los combates han hecho que miles de personas tengan que desplazarse a otras partes del país para alojarse en campamentos improvisados, donde se enfrentan a condiciones peligrosas y miserables.
Ndazimana Kasigwa: “El grupo rebelde M23 nos atacó anteayer, y así fue como decidimos huir de inmediato. Incluso dejé atrás a mi esposa e hijos. Ni siquiera traje ropa. Aquí no tengo comida, y el hambre nos va a matar”.
Según la Organización de las Naciones Unidas, al menos 188.000 personas han sido desplazadas en el este del Congo en las últimas semanas. Durante el fin de semana, las fuerzas armadas de Kenia enviaron al Congo 900 soldados para apoyar a las fuerzas armadas gubernamentales.