La Legislatura de mayoría republicana de Idaho aprobó un proyecto de ley contra el aborto que se elaboró siguiendo el modelo de la primera ley de este tipo promulgada en Texas, que efectivamente prohíbe los abortos después de las seis semanas de embarazo. La ley del estado de Idaho permite que los familiares de una persona embarazada, así como el posible padre, demanden a los médicos por realizar abortos. Si los demandantes ganan el caso, podrían obtener 20.000 dólares, más honorarios legales, del proveedor de servicios de aborto. Según la ley, un violador no puede presentar una demanda de este tipo, pero sus familiares sí tienen la posibilidad de hacerlo.
Esto ocurre pocos días después de que los legisladores de Idaho aprobaran un proyecto de ley que prohibiría el tratamiento con bloqueadores de la pubertad, terapia hormonal y cirugía de afirmación de género para niños y niñas transgénero. La medida también hace que sea un delito grave llevar a jóvenes trans a otros estados para que puedan recibir en otro lugar este tipo de atención médica. Las personas condenadas por estos cargos podrían recibir una sentencia de cadena perpetua.
Mientras tanto, el gobernador republicano del estado de Misisipi, Tate Reeves, firmó el lunes un proyecto de ley que limita cómo se puede hablar sobre la raza en las escuelas. La medida solo recibió apoyo por parte de republicanos blancos, y todos los legisladores negros de Misisipi se opusieron a la legislación y abandonaron sus puestos de trabajo antes de la votación como forma de protesta en enero.