En México, al menos dos personas murieron en un fuerte terremoto de magnitud 7,6 que sacudió el lunes por la tarde la costa occidental del país, en cercanías a la ciudad portuaria de Manzanillo. El sismo provocó una alerta de tsunami, derrumbó edificios cerca del epicentro y dejó sin electricidad a más de un millón de residentes. El terremoto, que se sintió en lugares tan distantes como la Ciudad de México y en lugares aún más alejados del epicentro, se produjo en el aniversario de dos grandes terremotos que devastaron el centro de México en 1985 y 2017 y pocas horas después de que las autoridades de ocho estados realizaran simulacros de preparación para terremotos. La alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo que no había informes de daños importantes en la capital y que el momento en que se produjo el terremoto fue pura coincidencia.
Alcaldesa Claudia Sheinbaum: “En términos científicos, no hay nada que diga que el 19 de septiembre es un día especial para que haya un sismo. En efecto, ha habido tres sismos en la ciudad en este día”.