En el estado de Tennessee, los padres de un hombre afroestadounidense de 29 años que murió tras ser brutalmente golpeado por policías de la ciudad de Memphis dicen que su hijo fue expuesto a un calvario en el que “no tuvo forma de defenderse”. Tire Nichols murió de insuficiencia renal y paro cardíaco el 10 de enero, tres días después de sufrir un violento arresto tras un control de tránsito. El lunes, los funcionarios de Memphis mostraron, en privado, a la familia de la víctima y a sus abogados las imágenes que tomaron las cámaras corporales de la policía durante el arresto de Nichols. Después de ver el video, ellos dijeron que Nichols había sido rociado con pimienta, inmovilizado, pateado y golpeado, y había recibido las descargas de una pistola eléctrica. Estas fueron las palabras expresadas por el abogado Antonio Romanucci, quien representa a la familia de Nichols.
Antonio Romanucci: “[Nichols] estuvo todo el tiempo indefenso. Era una piñata humana para esos policías. Le dieron una paliza absoluta, descarada e ininterrumpida durante tres minutos”.
Row Vaughn Wells: “¡Oh, Dios mío!”.
Antonio Romanucci: “Eso es lo que vimos en ese video”.
A raíz de la muerte de Nichols, la policía de Memphis despidió a cinco oficiales por violar las políticas del departamento, entre las que se encuentran el uso excesivo de la fuerza y no brindar ayuda. Al igual que Nichols, los cinco ex oficiales son negros. Tire Nichols era un patinador hábil, un fotógrafo aficionado y padre de un niño pequeño.