En Estados Unidos, en el estado de Texas, funcionarios del condado de Lubbock aprobaron una ordenanza que prohíbe a personas embarazadas viajar por la región para ir a otro estado a someterse a un aborto. Lubbock es el condado más grande de Texas en unirse a esta iniciativa. Al menos otros tres condados rurales también han aprobado medidas similares. Shelley Kemp, una residente de Lubbock, condenó la medida cuando se dirigió el lunes a los comisionados del condado.
Shelley Kemp: “Van a crear una cultura de miedo y desconfianza en la que pondrán a un vecino contra otro. La medida va a tener un efecto escalofriante. Por ejemplo, el lenguaje que utilizan, 'turismo abortivo' y “tráfico ilícito”, genera inmediatamente miedo y desconfianza”.