En Filipinas, el Gobierno del presidente Ferdinand Marcos Jr. y el Nuevo Ejército del Pueblo, el ala militar del Partido Comunista de Filipinas, reactivarán las negociaciones de paz por primera vez en seis años, las cuales serán auspiciadas por Noruega. Las negociaciones fueron interrumpidas de manera abrupta en 2017 por el entonces presidente Rodrigo Duterte. Si ambas partes llegan a un acuerdo, el Nuevo Ejército del Pueblo pondrá fin a su lucha armada de medio siglo y se convertirá en un movimiento político reconocido. Estas fueron las palabras expresadas por el asesor presidencial Carlito Galvez, quien en el pasado se desempeñó como funcionario de defensa.
Carlito Galvez Jr.: “Debido a los problemas socioeconómicos y ambientales, al igual que las amenazas extranjeras que enfrenta el país en relación a su seguridad, las partes reconocen la necesidad de unirse como nación para abordar de manera urgente estos desafíos y resolver los motivos del conflicto armado”.
La semana pasada, el presidente Marcos Jr. emitió una orden para conceder amnistía a varios grupos rebeldes, incluidos exmiembros del Nuevo Ejército del Pueblo y del Partido Comunista.