La Corte Suprema de Estados Unidos parece estar a punto de mantener la prohibición federal a la posesión de armas de fuego para las personas que tienen orden de alejamiento por violencia doméstica. Esto se produce más de un año después de que la mayoría de extrema derecha de la Corte Suprema revocó una ley de Nueva York, de más de un siglo de antigüedad, que limitaba el porte oculto de armas de fuego en espacios públicos. Dicho fallo exige que las nuevas leyes sobre armas de fuego sean coherentes con la tradición histórica de porte de armas en el país. Mientras los jueces escuchaban el martes los alegatos orales en el tribunal, los activistas en defensa del control de las armas de fuego y de la prevención de la violencia se manifestaron frente al edificio de la Corte Suprema.
Tarria Stanley: “He dudado en compartir mi historia, pero sé cuán importante es que hable en estos espacios, porque sé que muchas otras víctimas de abuso no pueden compartir sus historias. Y lo que es aún peor, muchas de ellas no han podido salir con vida de su situación. Y no tengo ninguna duda de que si mi agresor hubiera podido tener un arma de fuego, la puñalada que veo todas las mañanas en mi pecho habría sido una herida de bala, y hoy no estaría frente a todos ustedes”.
Se espera que en junio de 2024 se tome una decisión sobre este caso.
En noticias relacionadas, la Corte Suprema accedió el viernes a escuchar los alegatos orales en un caso que busca impugnar la prohibición federal de 2018 de los “aceleradores de disparos”, que pueden convertir los fusiles semiautomáticos en ametralladoras totalmente automáticas. La prohibición se produjo tras un tiroteo masivo que ocurrió en 2017 en la ciudad de Las Vegas, donde un hombre armado abrió fuego durante un festival de música country, donde mató a 60 personas e hirió a otras cientos. Debido a los aceleradores de disparos, el atacante disparó más de 1.000 balas durante la masacre.