El periódico The Washington Post confirmó que Israel utilizó fósforo blanco suministrado por Estados Unidos en ataques contra el sur del Líbano. El fósforo blanco supone un alto riesgo de causar quemaduras insoportables y sufrimientos de por vida. Su utilización como arma incendiaria en áreas habitadas por población civil constituye un crimen de guerra, que, según la legislación estadounidense, debería tener implicancias para la futura ayuda militar de Estados Unidos a Israel. La investigación del periódico halló que los ataques con fósforo blanco dejaron al menos cuatro personas hospitalizadas y obligaron a evacuar Dheira, una localidad situada en el sur del Líbano. En Washington D.C., el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, habló acerca de estos informes.
Matthew Miller: “Cada vez que proporcionamos elementos como fósforo blanco, o cualquier otra cosa, a otras fuerzas armadas, lo hacemos con la intención de que se utilice para fines legítimos y de plena conformidad con el derecho internacional humanitario y el derecho que rige los conflictos armados. Así que estamos investigando el tema y buscando información adicional al respecto”.