El presidente del Banco Mundial, David Malpass, anunció el miércoles que renunciará a su cargo a fines de junio, casi un año antes de que expire su mandato de cinco años. Malpass fue designado para dirigir el Banco Mundial en 2019 por el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El actual presidente del Banco Mundial se desempeñó como economista jefe del banco de inversión Bear Stearns durante los seis años previos a su colapso, que se produjo al comienzo de la Gran Recesión de 2008. En septiembre de 2022, el Gobierno de Biden presionó a Malpass para que renunciara, después de que este titubeara al contestar una pregunta formulada por David Gelles, un periodista experto en cambio climático del periódico The New York Times.
David Gelles: “El vicepresidente Gore estuvo aquí hoy y dijo, no sé si lo escuchó, que usted es un negacionista del cambio climático. ¿Podría aclarar esto? ¿Acepta el consenso científico de que la quema de combustibles fósiles está provocando un aumento peligroso de la temperatura global?”.
David Malpass: “Mmm…, algunos de los…, no conozco todos los detalles de los que está hablando. Me ha complacido mucho contar con el firme apoyo del Gobierno estadounidense en todas las iniciativas que hemos emprendido. Creo que algunas personas han hecho críticas infundadas. Es posible que no sepan lo que está haciendo el Banco Mundial”.
La organización en defensa de la justicia climática Oil Change International declaró en un comunicado: “El Grupo Banco Mundial sigue financiado más [proyectos de combustibles fósiles] que cualquier otro banco multilateral de desarrollo. Poner fin a este apoyo a [los proyectos de extracción] de petróleo, gas y carbón debe ser la prioridad número uno en las próximas seis semanas antes de que se inicien las Reuniones de Primavera del Banco [Mundial]”.