El lunes, altos funcionarios del gobierno ultranacionalista de Israel participaron junto a miles de colonos israelíes en una marcha hasta un asentamiento ilegal ubicado cerca de la ciudad de Naplusa, en los territorios ocupados de Cisjordania, para exigir que el Gobierno de Israel legalice y permita el restablecimiento de población judía en el asentamiento. En la marcha participaron el ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben-Gvir, así como el ministro de Finanzas, el ultraderechista Bezalel Smotrich, quien prometió expandir los asentamientos existentes y ayudar a crear nuevos asentamientos en Cisjordania, territorio al que llamó “nuestra tierra”.
Bezalel Smotrich: “Eviatar pronto será [un asentamiento] legalizado, tal como lo prometió el Gobierno anterior. Este lugar estará lleno de vida judía, [personas] íntegras, orgullosas, amantes de la tierra y de la Torá”.
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