Alemania cerró el sábado sus últimos tres reactores nucleares, tras décadas de debate y lucha por parte de activistas antinucleares. Estas fueron las palabras expresadas por Jürgen Trittin, un legislador del Partido Verde.
Jürgen Trittin: “La introducción de esta tecnología fue un error histórico. Y hoy estamos remediando este error”.
La tan esperada medida constituye solo una victoria parcial para los activistas ambientales, ya que la economía más grande de Europa ha aumentado su producción de carbón para compensar la pérdida de energía nuclear y la crisis energética provocada por la guerra en Ucrania. Los activistas antinucleares también señalaron que todavía no existe un plan definitivo para almacenar todos los residuos nucleares altamente tóxicos de las plantas fuera de servicio de Alemania, los cuales deben almacenarse de forma segura bajo tierra durante un millón de años.
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