El presidente Joe Biden recibió el martes al presidente israelí, Isaac Herzog, en la ciudad de Washington D.C., donde reiteró el apoyo de Estados Unidos a Israel a pesar del aumento de la violencia y de las violaciones contra sus derechos humanos del pueblo palestino, y la continua expansión de los asentamientos ilegales en la zona ocupada por Israel de Jerusalén Oriental y Cisjordania. Herzog habló con los periodistas que se encontraban frente a la Casa Blanca luego de reunirse con Biden en el Despacho Oval.
Presidente Isaac Herzog: “Hablamos sobre varios temas, incluidas la amenaza nuclear iraní y las operaciones que lleva adelante el grupo Hizbulá para hacer estallar el conflicto en la región, así como nuestra férrea alianza en materia de seguridad, incluida la capacidad de construir cooperación regional y avanzar en el círculo de la paz”.
Herzog pronunciará un discurso este miércoles en una sesión conjunta del Congreso de Estados Unidos. Algunos legisladores de los sectores progresistas del Partido Demócrata planean boicotear el discurso a modo de protesta por el trato de Israel hacia los palestinos. Entre los legisladores que se ausentarán a la sesión se encuentran la neoyorquina Alexandria Ocasio-Cortez y las dos primeras mujeres musulmanas que fueron elegidas para ocupar un escaño en el Congreso: la legisladora del estado de Minnesota Ilhan Omar y la legisladora del estado de Michigan Rashida Tlaib, quien es estadounidense de origen palestino. El martes, con 412 votos a favor y nueve en contra, los miembros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobaron una resolución que proclama que Israel “no es un Estado racista ni un Estado que aplique el apartheid”. La votación se organizó de manera apresurada luego de que la congresista Pramila Jayapal, que preside el Bloque Progresista del Congreso, declarara públicamente el sábado que Israel es un “Estado racista”. Tras enfrentar varias críticas, la congresista Jayapal aclaró posteriormente que sus comentarios iban dirigidos al Gobierno de extrema derecha del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.