El software de videoconferencia Zoom ha sido objeto de críticas tras cambiar sus términos de uso, que ahora permiten que la empresa utilice los datos de los usuarios para entrenar su sistema de inteligencia artificial. Por su parte, Zoom respondió el lunes a las reacciones en contra negando que la empresa utilizara el contenido de los videos o chats de los usuarios para entrenar los sistemas de inteligencia artificial sin su consentimiento. Sin embargo, los activistas en defensa de los derechos digitales afirman que Zoom podría seguir recopilando datos para otros fines. Además, advierten que posiblemente no será fácil para los usuarios optar por no autorizar el uso de inteligencia artificial si un anfitrión de la llamada decide permitirlo o no es consciente de ello. En 2020, los demócratas pidieron a la Comisión Federal de Comercio investigar las políticas de privacidad de Zoom, ya que acusaron a la empresa de engañar a los usuarios sobre la seguridad de su cifrado.
En noticias relacionadas, Zoom, uno de los primeros referentes asociados con el teletrabajo durante la pandemia, se enfrenta a duras críticas por parte de los empleados tras anunciar que exigirá a los trabajadores que se encuentren en un radio de 80 kilómetros de sus oficinas que vuelvan a trabajar de forma presencial dos días a la semana.