El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró el lunes sus advertencias a la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano, o FINUL, y pidió a dichas fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU que “cumplan con la solicitud de Israel y se aparten temporalmente de las zonas de peligro”.
Primer ministro Benjamín Netanyahu: “Las acusaciones de que Israel atacó deliberadamente al personal de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano son completamente falsas. Lo que sucedió es exactamente lo contrario. Israel ha pedido repetidamente a la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano que salgan de las zonas de riesgo”.
Netanyahu hizo estas declaraciones después de que soldados israelíes dispararan contra una torre de vigilancia de la FINUL y destruyeran parte de una base de las fuerzas de paz de la ONU cerca de la frontera israelí con el Líbano. Al menos cinco miembros de la FINUL han resultado heridos por los ataques de Israel. A pesar de los repetidos ataques, el jefe de las operaciones de paz de la ONU ha dicho que las fuerzas de mantenimiento de la paz permanecerán en sus posiciones. El lunes, el Reino Unido, Francia, Alemania e Italia emitieron una declaración conjunta calificando los ataques de Israel contra las fuerzas de mantenimiento de la paz como una violación del derecho internacional. Esto se produjo al tiempo que el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, condenó los ataques de Israel contra la FINUL y los calificó de “inaceptables”.
Josep Borrell: “Los 27 miembros [de la Unión Europea] acordaron pedir a Israel que cese los ataques contra la misión de la FINUL. Varios países de Europa participan en esta misión. Su trabajo es muy importante. Es completamente inaceptable que se ataque a las tropas de las Naciones Unidas”.