El Ejército de Israel ha llevado a cabo sus ataques aéreos más mortíferos contra el Líbano, donde, durante la noche del jueves, se han registrado unos diez bombardeos a gran escala contra suburbios densamente poblados del sur de Beirut.
El ministro de Salud libanés informa que al menos 2.000 personas han perdido la vida desde que Israel comenzó sus ataques contra el Líbano, incluidos al menos 127 niños y niñas, la mayoría de los cuales murieron en las últimas dos semanas.
El jueves, el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que los ataques israelíes habían hecho imposible para el organismo internacional el poder entregar grandes cantidades de suministros médicos y de traumatología que habían sido enviados a Beirut.
Asimismo, Ghebreyesus dijo que los ataques israelíes han matado a 28 trabajadores de la salud en solo 24 horas, mientras que decenas de hospitales y clínicas se han visto obligados a cerrar sus puertas.
Tedros Adhanom Ghebreyesus:
“En el sur del Líbano se han cerrado 37 instalaciones sanitarias, mientras que en Beirut, tres hospitales se han visto obligados a evacuar la totalidad del personal y de los pacientes, y otros dos han llevado a cabo evacuaciones parciales. \[…] Muchos trabajadores sanitarios no se están presentando a trabajar ya que se han visto obligados a huir de las zonas donde prestan servicios debido a los bombardeos”.