En Nueva York, la gobernadora Kathy Hochul está reviviendo un plan cuya finalidad es cobrar una tasa de congestión a los conductores que acceden a partes del distrito de Manhattan. Las nuevas tasas entrarán en vigencia antes de la investidura presidencial de Donald Trump, quien ha prometido eliminar dicha medida. En virtud de este plan, los vehículos que ingresen a la zona del bajo Manhattan durante las horas pico de tráfico deberán pagar una tasa de nueve dólares, un monto que se encuentra por debajo de los 15 dólares que originalmente se iban a cobrar antes de que Hochul cancelara en junio abruptamente el programa. Activistas contra el cambio climático como Keanu Arpels-Josiah, del movimiento de huelgas estudiantiles por el clima Viernes por el Futuro, están instando a la gobernadora Hochul a poner el futuro de la juventud de Nueva York por encima de la política.
Keanu Arpels-Josiah: “Escuche a nuestra generación y tome medidas frente a la crisis generada por el cambio climático, firme también la Ley del Superfondo Climático, una de las piezas legislativas sobre el clima más importante que tiene el país, que aún está a la espera de su firma”.