En los territorios ocupados de Cisjordania, ataques aéreos israelíes han matado al menos a cuatro palestinos. Dos de ellos murieron en un ataque con drones cerca de la ciudad de Qabatiya y otros dos en un ataque aéreo en Tammun, una localidad situada en las afueras de la ciudad de Naplusa.
Las muertes se produjeron después de que colonos israelíes armados llevaran a cabo una serie de ataques contra la población palestina de Cisjordania, durante los cuales quemaron sus viviendas y propiedades y destruyeron olivos. El domingo por la noche, varios colonos incendiaron más de 20 vehículos en la ciudad de Al-Bireh, mientras que en Deir Dibwan, una localidad cercana a la ciudad de Ramala, colonos pintaron grafitis con mensajes de odio en las paredes y prendieron fuego a un estacionamiento. Asimismo, colonos quemaron decenas de árboles en un olivar situado en la localidad de Burqa, al noroeste de Naplusa. Los palestinos que intentaron apagar las llamas afirman que fueron golpeados y apedreados por los colonos.
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