El Gobierno de Biden ha levantado la prohibición de envíos de armamento a la unidad militar ucraniana conocida como Brigada Azov, que anteriormente era un batallón paramilitar y que tiene vínculos con grupos de odio de extrema derecha. El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo el martes que una revisión exhaustiva del accionar de la brigada no halló evidencia de que sus miembros hayan cometido violaciones contra los derechos humanos. La Brigada Azov fue fundada en 2014 por un líder ucraniano que se autoproclama neonazi y supremacista blanco. Mientras tanto, delegados de 90 países se reunirán este fin de semana en Suiza para participar en una cumbre cuya finalidad es lograr la paz en Ucrania, aunque Rusia y países clave, como China, no participarán. La presidenta suiza, Viola Amherd, explicó el lunes los objetivos de la cumbre.
Presidenta Viola Amherd: “Queremos que se discutan formas para lograr en Ucrania una paz integral, justa y duradera basada en el derecho internacional y la Carta de la ONU. Queremos desarrollar un entendimiento común que nos dé la posibilidad de lograr un marco para alcanzar este objetivo. Y queremos decidir juntos una hoja de ruta sobre la manera en que las partes pueden vincularse en un futuro proceso de paz”.