Ocho solicitantes de asilo murieron luego de que la embarcación en la que viajaban se hundiera en el canal de la Mancha cuando intentaban trasladarse desde Francia al Reino Unido. Las personas fallecidas procedían de Eritrea, Sudán, Siria, Egipto, Irán y Afganistán. Varias de las personas sobrevivientes fueron trasladadas de urgencia a centros hospitalarios tras una operación de rescate que se llevó a cabo durante la madrugada del sábado. Entre los hospitalizados se encuentra un bebé de diez meses en estado de hipotermia. A principios de este mes, al menos doce migrantes perdieron la vida al realizar la misma travesía.
Organizaciones de defensa de los derechos humanos criticaron duramente a los Gobiernos del Reino Unido y de Europa por no proporcionar rutas migratorias seguras. Amnistía Internacional calificó el incidente como “otra tragedia atroz y evitable”.