El Gobierno de Estados Unidos ha activado la paralización de los servicios gubernamentales a partir de este miércoles, después de que los demócratas del Congreso estadounidense se negaran a respaldar un proyecto de ley de gastos públicos que no incluía concesiones en materia de atención sanitaria. Este es el primer cierre de Gobierno que Estados Unidos enfrenta en siete años, la última vez que ocurrió fue durante el primer mandato del presidente Trump. En esa ocasión, el Gobierno estadounidense se vio obligado a paralizar los servicios gubernamentales durante 35 días. El líder de la minoría del Senado, el demócrata Chuck Schumer, y el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, el demócrata Hakeem Jeffries, culparon del cierre a los republicanos y, en un comunicado conjunto, dijeron al respecto: “Tras hacer la vida más difícil y costosa durante meses, Donald Trump y los republicanos ahora han cerrado el Gobierno federal porque se niegan a proteger [el derecho a] la atención médica del pueblo estadounidense”. El presidente Trump había amenazado con despedir en masa a trabajadores federales si se producía el cierre del Gobierno. Estas fueron las palabras expresadas por el presidente de la Federación Nacional de Empleados Federales, Randy Erwin.
Randy Erwin: Desde el inicio del Gobierno de Trump, y después de hoy, vamos a haber perdido más de 300.000 empleados federales. Y no sabemos cuál es la funcionalidad de nuestro Gobierno con ese nivel de personal, porque el tamaño de la plantilla federal se ha mantenido prácticamente estable durante los últimos 60 años”.