Un séptimo fiscal renunció a su cargo en protesta por la decisión del Departamento de Justicia de Estados Unidos de retirar los cargos federales de corrupción contra el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, a cambio de su cooperación con las medidas represivas que Trump está implementando contra la inmigración. El fiscal adjunto interino de Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, Hagan Scotten, escribió en su carta de renuncia: “Cualquier fiscal adjunto de Estados Unidos sabe que nuestras leyes y tradiciones no permiten utilizar las facultades de los fiscales para influir de esta manera sobre otros ciudadanos y mucho menos de funcionarios electos”. El viernes, el fiscal general adjunto en funciones Emil Bove, un exmiembro del equipo legal personal de Trump, amenazó con despedir a 30 abogados de la Sección de Integridad Pública si ninguno de ellos presentaba una moción para desestimar el caso de Adams. Después de que dicha sección considerara renunciar en masa, un fiscal de larga trayectoria aceptó presentar la moción para salvar los puestos de trabajo de sus colegas.
Eric Adams habló el viernes en el canal Fox News junto al llamado “zar de la frontera” del Gobierno de Trump, Tom Homan, quien amenazó abiertamente al alcalde.
Thomas Homan: “Si [Adams] no cumple, regresaré a la ciudad de Nueva York y no estaremos sentados así, en un sofá. Me presentaré directamente en su oficina y le preguntaré '¿Dónde diablos está el acuerdo al que llegamos?'”.
Alcalde Eric Adams: “Y quiero que el Servicio de Inmigración cumpla. Quiero que el Servicio de Inmigración cumpla. Vamos a colaborar para garantizar la seguridad de la gente de esta ciudad”.
Esto ocurre al tiempo que aumentan los llamados para que Eric Adams renuncie como alcalde de Nueva York. Al menos tres vicealcaldes de Adams han manifestado su intención de dimitir.