Se espera que el presidente Trump emita este mismo viernes una orden ejecutiva para comenzar a desmantelar el Departamento de Educación. Aunque se necesitaría una ley del Congreso para disolver completamente dicha agencia federal, un borrador de la orden ejecutiva instruye a la secretaria de Educación, Linda McMahon, “a tomar todas las medidas necesarias permitidas por la ley” para desmantelar ese departamento. Es probable que esas medidas incluyan recortes a la plantilla de dicha agencia y a los programas educativos.
Esto ocurre al tiempo que el sindicato más grande de Estados Unidos, la Asociación Nacional de Educación, y la organización Unión Estadounidense para las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) están demandando al Departamento de Educación por amenazar con suspender la financiación federal a las escuelas que participan en programas de diversidad, equidad e inclusión. Dicha organización calificó la medida del Gobierno de Trump de “un ataque flagrante contra la libertad de expresión y la libertad académica, cuyo objetivo es privar al estudiantado de una educación integral y honesta”.