Las vidas negras importan: la lucha contra la impunidad policial en Estados Unidos

Columna09 de mayo de 2025
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Amy Goodman y Denis Moynihan

El 3 de mayo de 2024, Roger Fortson estaba hablando por videollamada con su novia cuando llamaron a la puerta de su casa. Fortson, un hombre negro de 23 años, era un aviador sénior de la Fuerza Aérea de Estados Unidos que estaba prestando servicio en el estado de Florida. El policía del condado de Okaloosa Eddie Duran había acudido al complejo de apartamentos donde vivía el joven en respuesta a una llamada que alertaba sobre un presunto altercado doméstico en el lugar. Una empleada del complejo lo llevó al apartamento de Fortson. Después de que el agente golpeara la puerta, Fortson la abrió y alzó su mano izquierda con la palma hacia afuera, en un gesto que no representaba amenaza alguna. En la otra mano, el joven sostenía una pistola legalmente adquirida, como era su derecho. En fracción de segundos, Duran disparó seis tiros a quemarropa contra Fortson, que cayó al suelo. Mientras yacía moribundo, el joven alcanzó a decir sus últimas palabras: “No puedo respirar”.

En cuestión de semanas, Duran fue destituido y acusado de homicidio involuntario, cargo por el que enfrenta una posible condena de 30 años de cárcel. Actualmente se encuentra en libertad bajo fianza a la espera de juicio. Mientras tanto, el abogado de derechos civiles Benjamin Crump, que representa a la familia de Fortson, interpuso recientemente una demanda civil contra Duran y el sheriff del condado de Okaloosa, Eric Aden, así como contra la empresa dueña del complejo habitacional y la trabajadora que dirigió erróneamente a Duran hasta el apartamento de Fortson.

Durante una conversación que mantuvo con Democracy Now! poco después de la muerte de Fortson, Benjamin Crump dijo: “El video que quedó registrado en el FaceTime de su novia es simplemente horrible. Se escucha que él dice 'no puedo respirar' y que el oficial de policía le grita: '¡No se mueva! ¡No se mueva!'. Así fue como perdimos a este joven, un rayo de luz para su familia y uno de los seres más luminosos de nuestra comunidad. […] El aviador sénior de la Fuerza Aérea Roger Fortson era un héroe de Estados Unidos. Era un patriota. Era un joven que estaba haciendo todo lo correcto. Estaba tratando de mantener a su madre; a su hermana Harmony, de diez años; y a su hermano André, de 16. Era sumamente inteligente. Formaba parte de las fuerzas especiales. Con él, [nuestra comunidad] le estaba ofreciendo lo mejor a Estados Unidos”.

Esta semana, al tiempo que Crump presentaba la demanda civil, volvió a la primera plana de las noticias otro caso en el que un hombre negro inocente murió bajo custodia policial. Tres exagentes del Departamento de Policía de la ciudad de Memphis comparecieron ante un tribunal estatal, donde enfrentaban cargos de asesinato por la muerte de Tyre Nichols. Nichols, un padre de familia negro, de 29 años, que trabajaba en la compañía de logística FedEx, retornaba a su casa en automóvil la noche del sábado 7 de enero de 2023 cuando fue detenido por agentes de policía en un control de tránsito.

Benjamin Crump, que también está trabajando en este caso, describió a Democracy Now! la forma en la que murió Nichols:

“El video de la detención de Tyre Nichols es uno de los registros en video de brutalidad policial más estremecedores que hemos visto. Nichols estaba a unas dos cuadras de su casa. No había infringido ninguna ley. Pero existía esta unidad Scorpion, una unidad táctica especial del Departamento de Policía de Memphis, a la que se le permitía hostigar y violar los derechos constitucionales de las personas negras en una determinada zona de Memphis, en el estado de Tennessee, con el pretexto de que estaban disuadiendo la delincuencia. […] Literalmente, lo golpearon hasta matarlo. Si no hubiera sido por la cámara que estaba en el poste de luz, probablemente habrían logrado evadir su responsabilidad. Pero esa cámara nos lo mostró todo”.

Los cinco agentes, todos hombres negros, formaban parte de un equipo policial tristemente célebre por sus prácticas violentas conocido como “unidad Scorpion”, una sigla en inglés que en español significa “Operación contra los delitos callejeros para restaurar la paz en nuestros barrios”. La unidad fue disuelta después de la muerte de Nichols.

Esta semana, en un juicio a nivel estatal, un jurado absolvió de los cargos de asesinato a los exagentes Tadarrius Bean, Demetrius Haley y Justin Smith. En un caso federal independiente, los tres fueron declarados culpables de manipulación de testigos y esperan sentencia por ese delito. Otros dos oficiales que también fueron condenados por ese cargo federal se declararon culpables de cargos estatales y evitarán así ser juzgados. Se anticipa que los cinco cumplirán un tiempo de condena en prisión.

La violencia policial es un problema persistente en Estados Unidos, que afecta de manera desproporcionada a las personas de color, especialmente a los hombres negros. Según la organización sin fines de lucro Mapping Police Violence, solamente en 2025 —y solo hasta el 24 de abril— se han producido 401 muertes a manos de la policía en 45 estados de Estados Unidos y en el Distrito de Columbia y más del 20% de estas víctimas son negras, una tasa sumamente desproporcionada respecto a la representación de la comunidad negra en la población total del país.

El presidente Trump abogó abiertamente por la brutalidad policial durante su campaña electoral de 2024. En un mitin que celebró en el estado de Pensilvania, en el que condenó los hurtos en tiendas, el actual mandatario estadounidense dijo: “Si hubiera un día realmente violento […], una hora [de tratos] duros, realmente duros, se correría la voz y [la delincuencia] terminaría de inmediato”.

Según informa el medio ProPublica, se espera que el Departamento de Justicia del gobierno de Trump suspenda los decretos de consentimiento o las órdenes judiciales que disponen supervisar diversos departamentos de policía con antecedentes problemáticos en todo el país, entre ellos, los de las ciudades de Mineápolis, Louisville y Memphis. Esto vuelve aún más crucial el trabajo de las organizaciones de base para exigir que la policía rinda cuentas por las conductas ilegales y el uso excesivo de la fuerza.

El Congreso de Estados Unidos, controlado por el Partido Republicano, presionó recientemente a las autoridades de la ciudad de Washington D.C. para que borren las palabras inscritas en una plaza pública que se volvió emblemática en 2020 cuando millones de personas protestaron por el asesinato de George Floyd a manos de la policía. Sin embargo, aunque quieran borrar las palabras, no podrán borrar el mensaje: las vidas negras importan.


© 2025 Amy Goodman

Traducción al español de la columna original en inglés. Edición: Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org

Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 800 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 450 en español. Es co-autora del libro “Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos”, editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.

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