En el Congreso de Estados Unidos, el Senado votó el jueves a favor de avanzar en el proceso de aprobación de la nominación de Emil Bove para un cargo vitalicio en el Tribunal de Apelaciones del Tercer Circuito. La votación, que contó con 50 votos a favor y 48 en contra, dejó al ex abogado penalista de Donald Trump a un paso de ser nombrado en el cargo. Dos republicanas, Lisa Murkowski y Susan Collins, se pusieron del lado de los demócratas y votaron en contra de la nominación de Bove, quien ha sido definido como un “ideólogo extremista” que, según se informa, instruyó a los abogados del Departamento de Justicia ignorar las órdenes judiciales que socaven la agenda de Trump.
Mientras tanto, la jueza de la Corte Suprema Elena Kagan dijo el jueves que la independencia de los tribunales federales está siendo atacada debido a las crecientes amenazas violentas que sufren los jueces y a la negativa de los funcionarios del Gobierno de Trump de respetar los fallos judiciales. Estas fueron las palabras expresadas por la jueza Kagan durante una conferencia judicial que se llevó a cabo en el estado de California.
Jueza Elena Kagan: “Esta idea de que los litigantes, y aquí estoy hablando principalmente de los funcionarios gubernamentales, no necesitan obedecer las órdenes de los tribunales, no necesitan obedecer los fallos judiciales, simplemente no es la forma como funciona nuestro sistema, no es la forma como funciona el Estado de derecho en este país. Y esa es la realidad de la Corte Suprema, y también de los tribunales de distrito”.