El sindicato que representa a miles de auxiliares de vuelo de Air Canada que estaban en huelga anunció el martes por la mañana que había alcanzado un contrato colectivo provisional con la aerolínea, lo que puso fin a un paro laboral de varios días. El acuerdo aún debe ser aprobado por los 10.000 auxiliares de vuelo que abandonaron el sábado sus puestos de trabajo para exigir salarios más altos. Los trabajadores desafiaron las órdenes emitidas por el Gobierno canadiense, que consideraba ilegal su huelga, y se arriesgaron a recibir multas o, incluso, penas de cárcel. Estas fueron las palabras expresadas el lunes en la provincia de Ontario por Mark Hancock, presidente del Sindicato Canadiense de Empleados Públicos.
Mark Hancock: “Vamos a mantenernos firmes. Vamos a mantener nuestro compromiso para asegurar que esos trabajadores puedan desempeñar el trabajo que aman hacer y, al mismo tiempo, costear un techo digno donde vivir y cuidar de sus familias. Y si eso significa que gente como yo vaya a la cárcel, que así sea. Si eso significa que nuestro sindicato sea multado, que así sea”.
El acuerdo tentativo se produce después de unos ocho meses de negociaciones. Air Canada es la aerolínea más grande de Canadá.