En un nuevo ataque contra la industria de las energías renovables en Estados Unidos, el presidente Trump ha ordenado a las empresas a cargo que detengan la construcción de un parque eólico frente a las costas del estado de Rhode Island. El proyecto estaba casi terminado y estaba previsto que suministrara electricidad a cientos de miles de hogares a partir del próximo año. La Oficina de Administración de Energía Oceánica envió una carta a uno de las empresas encargadas del proyecto en la que indicaba que el Gobierno de Estados Unidos iba a detener la construcción para “abordar cuestiones relacionadas con la protección de intereses de seguridad nacional”.
A principios de este año, el Gobierno de Trump había intentado detener la construcción de un parque eólico frente a las costas de la isla neoyorquina de Long Island, pero finalmente permitió que el proyecto siguiera adelante después de que la gobernadora Kathy Hochul aprobara la construcción de nuevos gasoductos en el estado de Nueva York.