En la ciudad de Washington D.C., efectivos de la Guardia Nacional desplegados por orden del presidente Trump han comenzado a portar pistolas M17 o rifles M4. La semana pasada, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, autorizó a los efectivos a comenzar a portar armas. Más de 2.200 miembros de la Guardia Nacional se encuentran actualmente desplegados en Washington D.C.
Asimismo, Trump ha amenazado con enviar la Guardia Nacional a la ciudad de Chicago, así como a las ciudades de Nueva York y Baltimore, en lo que supondría una drástica ampliación del uso de la fuerza militar en territorio estadounidense.
El periódico The Washington Post informa que el Gobierno de Estados Unidos está considerando desplegar miles de efectivos de la Guardia Nacional en Chicago y quizás también militares en servicio activo. El alcalde de Chicago, Brandon Johnson, dijo que el plan constituye “la violación más flagrante de la Constitución en el siglo XXI”.
Por su parte, el gobernador del estado de Illinois, J.B. Pritzker, afirmó: “Donald Trump está intentando crear una crisis, politizar a los estadounidenses que sirven en uniforme y seguir abusando de su poder para distraer la atención del dolor que está causando a las familias trabajadoras”.
El viernes, Trump afirmó que los residentes de Chicago quieren el despliegue de fuerzas federales en su ciudad.
Presidente Donald Trump: “La gente de Chicago, señor vicepresidente, está pidiendo a gritos que vayamos”.
Vicepresidente J.D. Vance: “Sí, así es, señor”.
Presidente Donald Trump: “Están usando gorras rojas, como esta, pero llevan gorras rojas. Las damas afroestadounidenses, hermosas damas, nos están diciendo: 'Por favor, presidente Trump, venga a Chicago'”.