Partido Conservador gana elecciones canadienses

En Canadá, el Partido Liberal perdió el gobierno luego de 12 años de mandato. Stephen Harper, del Partido Conservador, será el Primer Ministro del país. El Primer Ministro canadiense Paul Martín dijo: “Acabo de llamar a Stephen Harper para felicitarlo. Los ciudadanos canadienses lo han elegido para dirigir un gobierno minoritario. Le deseo lo mejor. Diferimos en muchas cosas, pero todos creemos en el potencial y la promesa de Canadá, y en el deseo de que nuestro país sea exitoso”. Varios analistas dijeron que la victoria de los Conservadores no era una señal de una inclinación de la sociedad canadiense hacia la derecha, sino el reflejo de la frustración general contra el gobernante partido Liberal. Los Liberales aparecieron en los titulares debido a una serie de escándalos por corrupción del gobierno. El líder del Partido Conservador, Stephen Harper, habló anoche y dijo: “Uno de los valores canadienses más antiguos y duraderos es la democracia. El principio de que podemos cambiar nuestro gobierno sin poner en peligro nuestra libertad y nuestras vidas”. Y agregó: “A pesar de las divisiones y discordias de las elecciones, la capacidad de cambiar y renovar pacíficamente el gobierno de nuestra nación sigue siendo una de las fortalezas de nuestro país”. Harper dijo que reconsiderará la negativa de Canadá a unirse al programa balístico de proyectiles de Estados Unidos y también su estatus de firmante del tratado de Kyoto. Pero las facultades de Harper estarán limitadas, de todos modos, debido a que su partido no obtuvo una mayoría parlamentaria. Entre los funcionarios de alto perfil del gobernante partido Liberal que perderán sus cargos está el Ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, Pierre Pettigrew. Pettigrew perdió su cargo parlamentario como representante de Montreal tras una campaña sin precedentes contra su reelección por parte de miembros de la comunidad haitiana de esa ciudad. Como Ministro de Asuntos Exteriores, Pettigrew dirigió la política canadiense en Haití. El gobierno canadiense está bajo una intensa observación, en medio de acusaciones de que respaldó el derrocamiento del Presidente haitiano Jean Bertrand-Aristride y apoyó las violaciones de los derechos humanos llevadas a cabo por la Policía Nacional haitiana.