Mientras tanto, en la ciudad de Nueva York, un afroestadounidense desarmado murió a causa de disparos de la policía en un edificio de vivienda social de Brooklyn el jueves por la noche. Akai Gurley se encontraba en las escaleras apenas iluminadas de Louis H. Pink Houses cuando se encontró con dos agentes. La policía dijo que el tiroteo parece haber sido accidental y que Gurley era “totalmente inocente”. Los manifestantes piden la detención del oficial. El sábado, Charles Barron, asambleísta electo del estado de Nueva York, ayudó a liderar una marcha desde la escena del tiroteo hasta la comisaría del proyecto de viviendas sociales.
Barron expresó: “Esto es una atrocidad. Estamos enojados, no hay manera, no hay manera de que un joven en una escalera con dos agentes de policía fuertemente armados y él desarmado, deba estar muerto. Esto es una locura, hay que ponerle fin. La gente está indignada. Esto está sucediendo en todo el país. No se valoran las vidas afroestadounidenses. No quiero escuchar nada sobre la escalera mal iluminada. No quiero escuchar nada de que él se haya sobresaltado. Este joven todavía debería estar vivo”.
El oficial, Peter Liang, fue asignado a otras tareas en espera del resultado de la investigación correspondiente.