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Chelsea Manning, denunciante detenida, el viernes inició una huelga de hambre para protestar contra las condiciones de encierro. En una declaración, Manning dijo que solo bebería agua y tomaría los remedios hasta que le proporcionen “estándares mínimos de dignidad, respeto y humanidad”. Manning exige que el ejército le prometa que recibirá las recomendaciones médicas prescriptas a raíz de su disforia de género. Manning cumple una condena a treinta y cinco años de cárcel en las barracas disciplinarias de Fort Leavenworth, Kansas. Ha sido sometida a extensos períodos de aislamiento y le han negado tratamiento médico relacionado a su identidad de género.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista (en inglés) que le hicimos a Chase Strangio. Strango es abogado de la Asociación Estadounidense por las Libertades Civiles, que representa a Chelsea Manning en un juicio contra el Departamento de Defensa de EE.UU.
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