¿Podría la escasa independencia del nuevo asesor especial impedir que llegue a la vasta corrupción en la Casa Blanca de Trump?

Han pasado otras 24 horas extraordinarias en la capital de EE.UU. La mayor noticia del día es que el fiscal general adjunto, Rod Rosenstein, designó al exdirector del FBI Robert Mueller para que se desempeñe como un asesor especial. Mueller tendrá que supervisar una investigación de los intentos del gobierno ruso por influir las elecciones presidenciales 2016 de EE.UU. La medida se tomó un día después de que se supiera que el presidente Trump había solicitado personalmente al director del FBI, James Comey, que el FBI abandonara la investigación que llevaba adelante de su ex asesor de seguridad nacional, Michael Flynn. Flynn fue despedido por mentir, tanto públicamente como en privado, acerca de sus contactos con funcionarios rusos. Por otro lado, el periódico New York Times informa que Trump escogió a Michael Flynn como su asesor sobre temas de seguridad nacional, a pesar de que Flynn le había advertido al equipo de transición de Trump que lo estaban investigado a nivel federal por trabajar secretamente como lobbista contratado por Turquía durante la campaña.

Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos a Macry Wheeler. Wheeler es una periodista independiente que escribe sobre seguridad nacional y libertades civiles. Además, dirige el sitio web EmptyWheel.net.