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El presidente estadounidense Donald Trump salió a despotricar contra Irán el domingo, advirtiendo que está preparado para desatar terribles “consecuencias” sobre Irán si su presidente vuelve a amenazar a Estados Unidos. Trump profirió esta amenaza pocas horas después del discurso pronunciado por Rouhani el mismo domingo, en el que el presidente iraní advirtió a Estados Unidos que no siga con su política de hostilidad hacia su Gobierno. Por su parte, el secretario de Estado, Mike Pompeo, también dio un discurso el domingo en el que comparó a los dirigentes de Irán con una “mafia” y prometió un algún tipo de apoyo a iraníes que estén descontento con su Gobierno. Pompeo dijo esto en la Bibilioteca Presidencial Ronald Reagan, ubicada en las afueras de Los Angeles. “Este Gobierno no está desarrollando una política que realmente trate de encontrar un camino a restablecer las negociaciones o concertar un nuevo acuerdo”, dice Trita Parsi, fundador y presidente del Consejo Nacional Estadounidense Iraní. “Todo lo que están haciendo actualmente sólo se puede entender como una política de confrontación”. Para ampliar esta información, vea (en inglés) nuestra conversación con Parsi.
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