El domingo 16 de junio, unos dos millones de manifestantes salieron a la calle en Hong Kong para exigir el retiro de un proyecto de ley que permitiría la extradición de los residentes en Hong Kong hacia China continental. Los manifestantes pidieron, además, la renuncia de la titular del ejecutivo de Hong Kong, Carrie Lam, y de otros funcionarios que impulsaron el proyecto de extradición. Lam se disculpó por el tratamiento del proyecto y postergó de manera indefinida la votación del proyecto, pero el proyecto no ha sido retirado completamente. Los detractores afirman que el proyecto de extradición violaría la independencia de Hong Kong y los derechos humanos y legales de los residentes y los visitantes de esa región. Hace apenas unos días, la policía arrojó gases lacrimógenos, balas de goma y gas pimienta contra decenas de miles de manifestantes.
Para saber más de este tema, puede ver la conversación que mantuvimos (en inglés) con Nathan Law y Minky Worden. Law es un activista a favor de la democracia y colaboró en la conducción del Movimiento de los paraguas. Worden es directora del programa Global Initiatives en Human Rights Watch.
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