Human Rights Watch afirma que al menos 200 solicitantes de asilo salvadoreños fueron asesinados, violados o torturados después de ser deportados de Estados Unidos a El Salvador.
En el reciente e impactante informe, Human Rights Watch halló que 138 personas deportadas a El Salvador fueron asesinadas por miembros de pandillas, policías, soldados, escuadrones de la muerte entrenados por Estados Unidos o exparejas entre 2013 y 2019. El informe sostiene que la mayoría de las víctimas fueron asesinadas por los mismos perpetradores de los que huyeron los solicitantes de asilo y que las muertes ocurrieron en un lapso de dos años posteriores a la deportación.
En más noticias sobre inmigración, la familia de un menor guatemalteco de cinco años recluido en un centro de detención para familias en la ciudad de Dilley, en el estado de Texas, sostiene que el menor no está recibiendo la atención médica adecuada por lo que podría ser una lesión cerebral traumática. La tía del menor afirma que este se fracturó el cráneo en un accidente ocurrido antes de que el menor y su madre fueran arrestados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas el mes pasado, durante lo que la familia pensó que era un chequeo de rutina.