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Después de un año de despidos, recortes y austeridad, el cuerpo docente y el personal no docente aglutinado en los cuatro sindicatos de la Universidad Rutgers aprobó un acuerdo pionero e inusual para proteger los empleos y garantizar aumentos salariales ante la emergencia fiscal declarada por la institución a causa de la pandemia. Una aspecto clave del acuerdo es la decisión de las y los profesores de realizar “trabajo compartido” y reducir levemente sus horas durante unos meses para salvar los puestos de trabajo de trabajadores con salarios más bajos. “Lo histórico de este acuerdo es que abarca los cuatro sindicatos”, dice Christine O’Connell, presidenta del sindicato que representa al cuerpo administrativo de Rutgers. “Es un acuerdo que protege los puestos de trabajo”. También hablamos con Todd Wolfson, presidente del Sindicato de trabajadores graduados, profesores y posdoctorados de Rutgers, que señala que la demanda principal de los sindicatos era evitar más despidos. “Esa demanda principal se cumplió y no habrá despidos durante el año académico y entrado el próximo año”.
Para conocer más sobre el tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Christine O’Connell y Todd Wolfson.
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