En México, dos migrantes mexicanos murieron y otros tres resultaron heridos el viernes en un tiroteo que se produjo cerca de la ciudad fronteriza de Tecate, en el estado de Baja California. El grupo de 14 migrantes se encontraba en el medio del desierto cruzando el Cerro de Cuchumá, un lugar sagrado para las comunidades indígenas locales y una ruta que comúnmente utilizan los narcotraficantes y traficantes de personas. Las autoridades mexicanas dijeron que aún se desconoce la causa del tiroteo. Las duras políticas fronterizas han obligado a los migrantes que se dirigen a Estados Unidos a depender de los traficantes y a cruzar la frontera a través áreas remotas y peligrosas, donde son vulnerables a la extorsión y a los actos de violencia por parte de las fuerzas del orden y las organizaciones narcotraficantes de México.
En noticias relacionadas, al menos diez migrantes cubanos murieron y más de una docena resultaron heridos el domingo después de que el camión de carga en el que viajaban volcó en una carretera del estado de Chiapas, cerca de la frontera con Guatemala. Asimismo, otro migrante de Ecuador también murió el sábado en un accidente de tránsito en la ciudad de Mexicali, al otro lado de la frontera de la ciudad californiana de Calexico, al chocar contra un autobús y un poste de servicios públicos mientras era trasladado en una camioneta tras ser detenido por funcionarios de inmigración mexicanos. Asimismo, al menos otros diez migrantes de Guatemala y Colombia también resultaron heridos en el mismo accidente.
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