En noticias sobre inmigración, un juez federal del estado de California ha impedido que el Gobierno de Biden aplique una medida que prohíbe a los inmigrantes solicitar asilo en la frontera sur sin haber antes solicitado protección en un país por el que hayan pasado en su viaje hacia Estados Unidos. El juez federal de distrito Jon Tigar ha atrasado su decisión por 14 días, por lo que la política sigue vigente y los funcionarios de Biden tienen tiempo para presentar una apelación. La decisión de Tigar fue elogiada por los activistas por los derechos de los inmigrantes, que han criticado al presidente Biden por apoyar prohibiciones relacionadas con las solicitudes de asilo similares a las promulgadas por Trump. Las nuevas normas de asilo entraron en vigor en mayo, y sustituyeron a la cuestionada política del Título 42 del Código de Regulaciones Federales de Estados Unidos que se implementó al inicio de la pandemia y se usó para expulsar a casi tres millones de solicitantes de asilo en la frontera entre Estados Unidos y México sin el debido proceso.
La medida de Biden también obliga a los inmigrantes a programar sus citas para la solicitud de asilo a través de una aplicación para teléfonos inteligentes de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras que, según los solicitantes de asilo, está plagada de problemas y plantea serias dudas sobre la privacidad de los usuarios. La Unión Estadounidense para las Libertades Civiles dijo: “El fallo es una victoria, pero cada día que el Gobierno de Biden prolonga la lucha en relación a su prohibición ilegal, muchas personas que huyen de la persecución y buscan un lugar seguro para sus familias se ven expuestas a serios peligros”.