El papa Francisco está pidiendo a la comunidad internacional que tome medidas para detener el ahogamiento de los refugiados que intentan llegar a las costas europeas. Durante su visita a la ciudad francesa de Marsella, el papa Francisco dijo que el mar Mediterráneo “se ha convertido en un gigantesco cementerio, donde muchos hermanos y hermanas se ven privados incluso del derecho a una tumba”.
Papa Francisco: “No debemos acostumbrarnos a ver las catástrofes que ocurren en el mar como meras noticias y a aquellos que mueren en el mar como cifras. No, ellos tienen nombres, rostros e historias. Ellos representan vidas rotas y sueños destrozados”.
La ONU ha registrado unos 25.000 ahogamientos en el Mediterráneo desde 2014, aunque es probable que la cifra real de muertes sea mucho mayor.